Durante los últimos 20 años, los vecinos del Malecón Calicanto edificaron sus viviendas al borde de un acantilado con vista al río Huallaga, en el distrito de Amarilis – Huánuco, pero sin supervisión técnica.
Estas construcciones – aparentemente ilegales – tuvieron la autorización del concejo municipal sin calcular los riesgos frente a desastres naturales como, por ejemplo, sismos o derrumbes. Algunas edificaciones son tan altas que, ponen en peligro la vida de quienes las habitan.
Al respecto, Omar Gonzales Hidalgo, gerente de Desarrollo Urbano, Rural y Defensa Civil, de la Municipalidad Distrital de Amarilis, señaló al problema como algo difícil de solucionar a estas alturas; sin embargo, lo que si pueden hacer es fiscalizar y multar.
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“En ese aspecto, nosotros estamos haciendo todo lo necesario para fiscalizar, notificar y multar, lo que esta a nuestro alcance. Sin embargo, no podemos ir y retirarlos a la fuerza porque no nos compete (…) ni la fiscalía lo puede hacer”, explicó el funcionario.
Anunció, además, que la comuna distrital trabaja en un “programa de concientización sobre viviendas seguras” para evitar que la ciudadanía edifique casas en zonas de alto riesgo. “Lo primordial es la vida, no lo material”, finalizó Omar Gonzales.
La misma pregunta también se le trasladó al alcalde Roger Hidalgo. El burgomaestre, aseguró la municipalidad de Amarilis, ya no permitirá más construcción sin supervisión técnica. “Eso (construcciones) no se va a permitir porque es un riesgo inminente, hay que resguardar la vida de la población”, dijo Hidalgo.
Las Terrazas de Llicua, es otro ejemplo de terquedad al momento de erigir casas. Cientos de familias de este populoso asentamiento humano del distrito de Amarilis, están expuestos ante posibles deslizamientos de tierra.
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