El alcalde de la Municipalidad de Amarilis, Roger Hidalgo, viene ejecutando una intervención vial en el sector: más de 12 kilómetros de mantenimiento y afirmado de vías, beneficiando directamente e indirectamente a más de 30 mil vecinos.
Los trabajos comprenden tres tramos principales: Primer tramo: Av. San Francisco; segundo tramo: Jr. San Pablo, San Carlos, Divino Maestro, Psj. San Jorge y el tercer tramo: Jesús de Nazareno, Calle 4 y Jr. San Carlos.
Esta transformación es posible gracias al Convenio de Colaboración Interinstitucional suscrito en 2025 con el Batallón de Ingeniería del Combate Motorizado Huascarán N.° 112 del Ejército del Perú – Tingo María, una alianza que articula maquinaria pesada, recursos técnicos y personal operativo al servicio del pueblo.
Pero el cambio no termina cuando cae la noche. Gracias a un segundo convenio con la empresa Electrocentro, también se viene realizando la instalación de modernas luminarias LED, reemplazando a las antiguas luces ámbar, y mejorando significativamente la iluminación y la seguridad en todo el sector intervenido.
“Aquí no estamos maquillando calles, estamos cerrando una herida de más de ocho décadas. Lo que hoy hacemos en La Esperanza no es solo afirmado: es dignidad, es justicia y es compromiso. Esta gestión ha decidido ir a donde nadie fue, escuchar a quienes nunca fueron escuchados y trabajar donde otros solo prometieron. Amarilis tiene rumbo, y ese rumbo se construye con hechos, no con discursos vacíos”, expresó el alcalde Roger Hidalgo, durante su visita técnica a las zonas intervenidas.
Los vecinos, muchos de ellos testigos del abandono por generaciones, reconocieron el cambio. La señora Magaly Reyes, vecina de la Calle 4 de la Esperanza, comentó con emoción contenida: “Aquí solo venían a tomarse fotos en campaña. Hoy vemos maquinaria trabajando, luces nuevas y calles que ya no nos avergüenzan. El alcalde está haciendo lo que nadie hizo: acordarse de nosotros.”
La intervención vial y el mejoramiento del alumbrado público no solo vienen mejorando la transitabilidad y la seguridad ciudadana, también representan una señal clara de que el desarrollo en Amarilis está llegando hasta donde antes parecía imposible.

