Pocos ciudadanos recuerdan o están informados lo que significó el Modelo Económico de Velasco (MEV) y lo que provocó. El MEV fue un cataclismo que dejó al Perú en cuidados intensivos por más de dos décadas. Fue engendrado por la izquierda durante la dictadura de Velazco en 1968 y trazó el camino de las decisiones del gobierno militar tras el putsch a Belaunde.
Al MEV le debemos las estatizaciones de empresas mineras, asimismo, fue el autor de la demolición de la agricultura, la pesquería y alimentó la deuda externa, impagable hasta hoy. Cifras del INEI indican que la deuda externa pasó del 15 % a más del 50 % al final de la dictadura del ‘Chino’ Velasco.
La estatización de empresas durante la dictadura del 70 se dio a pesar que Velasco sostuvo que era un peligro, así lo recuerda el historiador Antonio Zapata. “Velasco había declarado contra la corrupción en forma explícita, se había referido a los peligros del estatismo, sosteniendo que generaba burocratización y creaba condiciones favorables a la inmoralidad y el enriquecimiento ilícito de la burocracia que medra con grave daño al Perú” (La caída de Velasco, página 35).
En la actualidad, más de un político de izquierda busca emular el actuar de Velasco y han ofrecido nacionalizar el gas natural del país para recuperar “la soberanía” sobre los recursos naturales. Los ciudadanos deben ser conscientes que las ideas estatistas y populistas conducen al fracaso.
A finales de la década del 80 cerca del 90% del empleo era informal, en el 2002 se llegó a 85%, el 2018 esa cifra decreció solo al 72%, en estos días se estima que ya se rebasó el 100%.
