“Se necesitan señoritas para disco bar que sean mayores de 18 años, se cubre pasajes, alimentación y hospedaje para Madre de Dios-Boca Colorado. Llamar al 968 443 965-967 376 881”, dice uno de los centenares de avisos pegados en una de las paredes de “El Negociado”, una agencia de empleos muy concurrida de la cuadra 3 del jirón Tecte, en el Cercado del Cusco. Llegamos hasta aquí porque nos dijeron que era un centro de reclutamiento de jovencitas para que trabajen en los bares de los campamentos mineros de Madre de Dios. En este caso, el aviso en grandes caracteres especificaba que se trataba de Boca Colorado.
Boca Colorado es un poblado ubicado en el distrito de Madre de Dios, en la provincia del Manu, en la región Madre de Dios. Es conocido porque en ese punto se concentran mineros ilegales de oro.
La carencia de empleo y el cierre de negocios, en especial los vinculados con el turismo, han servido como terreno fértil para la aparición de este tipo de convocatorias de oportunidades de trabajo en Cusco con destino a Madre de Dios.
Así que llamé a uno de los teléfonos para avisar que estaba muy interesada en trabajar y quería saber las condiciones. La Policía y la Fiscalía de Cusco me habían confirmado que El Negociado era un punto de reclutamiento clandestino de mujeres, a quienes se les prometía falsamente un puesto laboral muy bien remunerado, pero eran engañadas y sometidas a trabajos forzosos, un delito penado pero invisible.
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Respondió a la llamada una persona que se identificó como ‘Miguel’. No dio mayores datos para no levantar sospechas. ‘Miguel’, lo primero que me preguntó fue la edad, y le dijimos “25 años” para que no cortara la comunicación. Quería mujeres para “atender a los clientes” del bar, una manera de ocultar el verdadero propósito del reclutamiento.
Fachada de El Negociado en Cusco. Foto: La República
“Solo para atender clientes”
En este caso, no pagaba un sueldo, sino un porcentaje de los licores que comprara mi “cliente”. Esto es lo que hablamos:
- Llamo por el aviso. ¿En qué consiste el trabajo?
- ¿Alguna vez ha trabajado en un bar y en Madre de Dios?
- En Madre de Dios no he trabajado, pero sí en bares.
- ¿Tomando (bebiendo) con clientes?
- No, limpiando mesas y atendiendo a los clientes en el mostrador.
- Ah, limpiando. El aviso no es para limpieza, sino para atender al cliente. O sea, tienes que sentarte a tomar con el cliente. Por cada par de cerveza que compra el cliente —cada botella cuesta 30 soles—, ganas 10 soles. Si tomas una Corona (cerveza) —que tiene un valor de 50 soles—, ganas 25 soles.
- ¿Y cuánto es la paga o sueldo?
- No hay sueldo. Eso depende de lo que tú vendas al cliente. Si haces que el cliente consuma más cerveza, puedes ganar entre 4.000 a 6.000 soles mensuales. Todo depende de ti.
- ¿Y cómo es con mi traslado?
- Yo te doy el dinero o te compro el pasaje hasta Boca Colorado. Del Cusco hasta Santa Rosa (Madre de Dios) son seis horas y de allí una persona te recogerá para llevarte hasta Boca Colorado, donde queda el disco-bar.
- La alimentación y el hospedaje, ¿lo cubren ustedes?
- Claro, nosotros te damos alimentación y hospedaje. De eso no te vas a preocupar.
‘Miguel’ picó el anzuelo y acordamos encontrarnos cerca al centro comercial de la avenida La Cultura, ubicado en el distrito de San Sebastián, a unos 45 minutos de la plaza de Armas de Cusco. No estaba solo. Aseguró que su esposa sería la encargada de ofrecer los detalles del trabajo en un local de Boca Colorado.
A los pocos minutos, ‘Alcira’ —nombre supuesto para preservar su verdadera identidad— se identificó como la conviviente de ‘Miguel’. Fue ella quien me llamó para describir el trabajo que haría en un bar de Boca Colorado. Esto fue lo que conversamos:
“La nota (el asunto) es acompañar al cliente a tomar cerveza. Si ‘fichas’ (hacer que el cliente consuma) harto, más ganas. No hay sueldo. Te pagamos por lo que el cliente consume. El negocio es: Si vendes un par de cervezas que cuesta 40 soles, ganas 20 soles, por dos ‘Corona’ que son 100 soles, ganas 50 soles. Por un agua (mineral) vendida, que cuesta 20 soles, ganas 10 soles. Así de fácil es el trabajo”.
“Te pueden abrazar o tocar”
‘Alcira’ me dijo que el disco bar funcionaba todos los días, sin descanso, en un horario que fijaba la dueña del local, y que la trabajadora debía estar disponible en todo momento. Esto es lo que me indicó:
“Acá se trabaja todos los días, desde las 2 de la tarde hasta las 3 de la madrugada. El negocio empieza mejor en la noche, donde hay más clientela. Acá no vas a barrer ni limpiar mesas. Acá el negocio es el cliente y lo que tú vas a ‘fichar’. Si fichas más, más ganas, puedes sacar hasta 5.000 soles mensuales”, indicó ‘Alcira’.
‘Alcira’ había descrito una situación de trabajo forzoso, una práctica que está penada en el país.
Le pregunté si en el local había seguridad en caso un cliente hiciera tocamientos indebidos. ‘Alcira’ minimizó el tema.
Sorprendentemente, aceptó que podrían registrarse este tipo de actos de acoso sexual, pero resaltó que valía la pena si el cliente consumía más. Así me lo dijo:
“Te pueden abrazar o tocar, pero los clientes no van más allá. Todo depende de ti. Lo importante es que el cliente consuma más”.
‘Alcira’ aseguró que los pasajes, viáticos, hospedaje y vivienda, eran gastos que ella los cubría, siempre y cuando se trabajaba como mínimo un mes en el disco bar. De lo contrario, se le descontaba a la trabajadora de sus ingresos hasta cubrir la totalidad de lo gastado. Así me lo dijo:
“Si no cumples el mes, te descontamos. La idea es que te quedes más de un mes, si no, no es negocio”.
“Eso ya depende de ti”
Elegí otro aviso al azar en El Negociado. Decía: “Señoritas para atender en disco bar, se da alimentación, vivienda, pasajes, trato familiar. Disponibilidad de viaje comunicarse al 958270151”. Sin embargo, a diferencia del anterior anuncio, no consignaba el lugar donde me esperaba un puesto de trabajo.
Respondió una mujer que se hizo llamar ‘Yuli’. Desconfiada, fue muy cuidadosa para detallar en qué consistía el trabajo en el disco bar. Me dijo que el local estaba ubicado en el centro poblado Virgen de La Candelaria, en el distrito de Inambari, en la provincia de Tambopata, Madre de Dios. Esto es lo que hablamos. Así se engancha a las jovencitas:
- ‘Yuli’: El trabajo no es dentro de Cusco, linda. Es fuera del Cusco.
- ¿En dónde?
- ‘Yuli’: Puerto Maldonado. ¿Conoces?
- Sí, sí conozco. Solo una vez estuve en ese lugar.
- ‘Yuli’: Ah, ya.
- ¿En qué parte de Puerto Maldonado está el bar?
- ‘Yuli’: Es una comunidad, se llama Virgen de Candelaria, que está en la vía principal del pueblo.
- ¿Cómo es el trabajo?
- ‘Yuli’: Como te digo, así como dice el aviso, el trato es familiar. Tienes desayuno, almuerzo y cena. Normalmente, un sueldo acá en Cusco está entre 900 soles hasta 1.500 soles mensuales, pero allá (en Puerto Maldonado) ganas más de 1.000 soles en una semana, linda.
- Pero ¿qué tengo que hacer?
- ‘Yuli’: Como te digo, es un disco bar donde se vende todo tipo de bebidas. Es atención al público. Es como en las discotecas donde van todo tipo de personas. Yo no te puedo decir que te embriagues. Eso ya depende de ti. No se trata de tomar, sino de avanzar. Según lo que tú avanzas, ganas también. Si avanzas, ganas el 50%.
Por “avanzar” se entiende por la cantidad que consiga que mi “cliente” compre licor. A más botellas, más gano.
Afiches de trabajos. Foto: La República
Desconfiada, ‘Yuli’ pidió que la conversación continuara de persona a persona y sugirió una cita en la entrada del distrito de San Gerónimo, ubicado a una hora de la plaza de Armas del Cusco. El contacto terminó en este punto, porque requería continuar su viaje a Madre de Dios.
“Acá lo arreglamos con la Policía”
‘Guillermo’ respondió al teléfono de un nuevo aviso que escogí en El Negociado. Esta vez, yo le dije que estaba buscando empleo para mi hermana de 17 años de edad. ‘Guillermo’ dijo que haría algunas consultas. A los tres días, respondió que no había problema. ‘Guillermo’ aceptó contratarnos a mí y a mi supuesta hermana.
Así fue la conversación:
- ‘Guillermo’: Señorita, estoy en el Cusco. ¿Se anima con el trabajo?
- ¿Solo para mí o también para mi hermana?
- ‘Guillermo’: ¿Tu hermana cuándo cumple 18 años?
- “En diciembre”.
- ‘Guillermo’: Envíeme una foto de usted y de su hermana para verlas.
- Una vez que le pasé las fotografías, me llamó.
- ‘Guillermo’: Su hermana podría pasar como de 18 años, por su fisonomía.
- Pero en su DNI está su fecha de nacimiento.
- ‘Guillermo’: No se preocupe, señorita, acá en (Madre de Dios) lo arreglamos con la Policía.
Así funcionan las mafias del reclutamiento de mujeres para los bares clandestinos de los centros mineros en Madre de Dios. No les importa si las “trabajadoras” son menores de edad. Por eso, ‘Guillermo’ siguió llamando hasta tres semanas después, atraído por mi “hermana” de 17 años.
“Buen día, señorita. No sé si sigue interesada en el trabajo. Estoy en el Cusco. Conversemos”, dijo ‘Guillermo’ por WhatsApp la última vez.
De acuerdo con fuentes de la Dirección contra la Trata de Personas y Tráfico Ilícito de Personas y del Ministerio Público, la modalidad de reclutamiento de niñas y jóvenes para laborar en los bares instalados en los alrededores de campamentos de mineros ilegales, en Madre de Dios, suele derivar en la comisión de los delitos de trabajo forzoso y explotación sexual.
Este reportaje contó con la asesoría y apoyo de CHS Alternativo.
Fuente: La República